Un poco más

Cuando yo era pequeño el uno de noviembre era un día gris y frío en el que íbamos al cementerio. Yo no entendía muy bien por qué íbamos, nosotros y la gente en general, al cementerio el día uno de noviembre, fiesta de Todos los Santos (el mío, el tuyo, el de todos, pensaba entonces —pienso ahora—) en lugar de ir el día dos que es el día de Todos los Difuntos. No lo entendía entonces, ni lo entiendo ahora. Pero siempre o casi siempre era gris y, sobre todo, frío. Y alrededor de ese día siempre había huesos de santo de postre. Los huesos de santo me gustaban entonces, y ahora, porque están hechos de mazapán, que me gusta, y que además me evocaba antes, y ahora, aunque menos, que la navidad se acercaba y por navidad los mazapanes se servían a diario.

Ahora que soy mayor el día uno de noviembre es un día espléndido y hace calor. El termómetro marca 20,7º a las cuatro y media de la tarde. Y en mi patio ya no da el sol desde hace varias semanas y no tiene opción de calentarse en exceso. Pero hace calor. Y ocurren más cosas, que no sé a qué se deben. Cosas como acceder un 31 de octubre, Halloween, a las seis y media de la tarde, mientras se hace de noche y en manga corta, al Hipercor y encontrármelo adornado de navidad, cuando aún no he saboreado un hueso de santo ni su mazapán ni su evocación navideña, cuando aún no he usado un jersey de lana o una bufanda o unos guantes.

Por no hablar de que tengo todas las plantas en flor, como en abril, pero en noviembre. Así no es muy difícil volverse un poco más loco.

13 thoughts on “Un poco más

  1. No recuerdo yo un «adelanto» tan manifiesto de la Navidad como el de este año y creo que es consecuencia de la crisis, para incitarnos al consumo lo antes posible.

  2. Yo cada año me sorprendo más de que esto de la Navidad dure tanto. El año pasado ya hice algún comentario sorprendido de que a finales de octubre, principios de noviembre ya hubiera escaparates decorados con motivos navideños. Éste más de lo mismo … en fin, es lo que hay.
    Hoy el día aquí ha sido rarito. A ratos calor, a ratos cielo nublado. Pero por lo visto, y según dicen todos los meteorólogos, ya entra el otoño. Se ve que con esto de la crisis ha tenido que coger transporte público y de ahí el retraso, o algo.

    Besicos!

  3. Uy, tiatiatia, yo nunca fui de ir al cementerio que es muy de humanos eso de morirse y da mal rollo, nonono.

    Y de lo otro, po no sé, que con tanto decir que el espíritu navideño de bondad y buenas acciones no es sólo para navidad, sino para todo el año, igual ha calado fuerte en El Corte Inglés, vete a saber.

  4. Mucha pereza tanta Navidad me parece que voy a pasar este año, aunque luego como siempre a mediados de diciembre me entrará.

  5. Pues sí, entre Halloween, el calentamiento global y la Navidad adelantada, Todos los Santos ya no se parece en nada a lo que era.

    A mí este año me han faltado hasta los huesos de santo…

  6. Muy bueno, el mundo se está volviendo loco y nosotros con él. El invierno cada vez se saborea menos, y la navidad, sobre todo por aquí abajo, hace mucho que no huele a frío y castañas…
    Me ha gustado mucho! 🙂

  7. Ya es Navidad? Jorl!
    Yo iba al cementerio, pero de noche cerrada y a hacer espiritismo, jisjisjis! Hasta que un día se nos apareció un ánima en pena… Ains! Qué tiempos!

  8. Es un tanto agobiante. Por donde vaya uno ya se encuentra con el espumillón de frente. La Navidad es para los niños. Y ya ta’

  9. en mi casa tampoco éramos de ir al cementerio, más bien de irnos de puente aprovechando el festivo…
    Lo de adelantar la navidad está alcanzando cotas insoportables, a este paso en agosto servirán tapas de mazapanes con el tinto de verano.

  10. Acabo de encontrarte. Lamento no tener recuerdos. He estado husmeando en tus cosas y en las de los demás. Me has parecido necesario. Me pregunto si has encontrado trabajo. Es una situación dolorosa. He dado contigo porque se me había ocurrido el mismo nombre, cinco años después. Pero no estoy seguro de tener muchas cosas que compartir. Saludos, JL.

Comments are closed.