Después de unas semanas con demasiado movimiento trasnochador, de llegar a casa a horas diferentes y muy intempestivas he refutado mi teoría de la vecina del primero.
Sea la hora que sea a la que llegue la muchacha (viernes a las 2, sábado a las 4, justo igual que yo), se baña y/o se ducha. Todos los días. Debe tener esa costumbre de asearse antes de irse a la cama, cosa que no sería problemática si yo no estuviera pendiente de ella.
Analizando mis horas de llegada a casa y las suyas, y sus costumbres, creo que encajaríamos. Además tenemos otra cosa en común (el baño de medianoche yo no lo practico): ese piso ha sido de los dos, porque antes de comprar el mío yo reservé ese piso (que perdí, junto con los 3000 de señal, por quedarme con el mío).
Creo que es una buena excusa para subir a conocerla.
Más vale que sea limpia la chica a que sea de las que sacuden la alfombra por la ventana y cae todo abajo, a tu patio. Todavía no has mencionado si está buena…
Todavía no la conozco…
Si lo que yo te diga, en un par de años te montas el duplex con vecinita incluida
🙂